La Plaza de San Marcelo representa, junto a la adyacente Plaza de Santo Domingo, la transición entre la Ciudad Antigua y el nuevo León. En su centro conserva un pequeño jardín que alberga una fuente neoclásica construida en 1786. También se emplaza en esta zona una gran maqueta de bronce, obra de Juan Carlos Ponga, donde puede verse el cambio urbanístico que ha sufrido la ciudad desde la época romana a la actualidad.
En su día se levantó en esta zona de la ciudad el Hospital de San Antonio Abad, que se abandona a finales del siglo XIX, demoliéndose entre 1920 y 1930, en parte para trazarse la actual calle de la Legión VII. Si bien hoy día no se conserva nada del hospital, si podemos contemplar los dos edificios que los abrazaban: el Ayuntamiento de León y la iglesia de San Marcelo, ambos de estilo renacentista clasicista con la marca de su autor Juan de Ribero Rada.
El Ayuntamiento o Palacio de la Poridad se asienta en el mismo lugar que ocupó el edificio medieval. Sus obras se iniciaron en 1584, concluyéndose cuatro años después. Al edificio renacentista pertenecen únicamente los siete primeros órdenes clásicos superpuestos de la arquería norte y los cinco de la este, a partir de la esquina de la calle de la Legión VII. El resto se construyó en la década de los años sesenta del siglo pasado el arquitecto Luis Menéndez Pidal.
Por el contrario, las obras de construcción de la iglesia de San Marcelo se prolongaron mucho más, iniciándose en 1588 y concluyéndose en 1628. La fundación de la iglesia de San Marcelo se remonta a principios del siglo IX, siendo restaurada en el año 1096.
Otro edificio que merece una mención especial es el Palacio de Torreblanca, llamado así por su antiguo propietario, el Marqués de Torreblanca. Se sitúa en la parte derecha del Antiguo Ayuntamiento y data del año 1672. Durante toda su historia ha cumplido diferentes funciones, en la actualidad el palacio es la sede del Nuevo Recreo Industrial.
Otro edificio que llama la atención es el Palacio de Hernando Villafañe, construido en el siglo XVII por el entonces regidor de la ciudad Hernando Villafañe. Destaca el centro, construido con piedra de sillería, donde también se puede ver un llamativo escudo de armas tallado con la cruz de San Andrés y dos cruces de Santiago. Actualmente aloja una tienda de moda de un importante empresario leonés.
Palacio de los Guzmanes, levantado por Gil de Hontañón según encargo del que fuera obispo de Calahorra, don Juan de Quiñones y Guzmán. Se finalizó en el año 1571.
La casa Botines es un edificio de estilo modernista. Originalmente era un almacén comercial y residencia particular. Construido y diseñado por el arquitecto Antonio Gaudí entre 1891 y 1892, es una de sus tres obras fuera de Cataluña, junto al Palacio Episcopal de Astorga y el Capricho de Comillas en Cantabria.
El término casa Botines deriva del apellido del fundador de la sociedad, Juan Homs y Botines, empresario y comerciante de origen catalán asentado en la capital leonesa. Sus socios Mariano Andrés González-Luna y Simón Fernández Fernández fueron los responsables del encargo de la casa a Gaudí. En la actualidad acoge el Museo Gaudí Casa Botines.