León posee también una gran variedad de plazas en las que poder sentarse a descansar y poder divisar las maravillas de sus alrededores.
La Plaza Mayor (s. XVII) constituye el centro del Casco Histórico y fue pensada para recoger el tradicional mercado de miércoles y sábados y las actividades lúdicas de la ciudad, entre las que figuraban las corridas de toros. Destaca por su aire popular no académico que contrasta con el edificio del “Mirador de la Ciudad”, conocido como Consistorio Viejo. Hoy sigue siendo núcleo de la movida nocturna y bajo ella se ha construido un parking.
León cuenta con otras plazas importantes. La más pintoresca es la Plaza del Grano, también conocida como la Plaza del Mercado. Para muchos, la plaza más bonita de León por su tipismo.
La Plaza de Guzmán el Bueno recibe y da la bienvenida al visitante que se acerca a León desde la estación de ferrocarril y lo introduce en la avenida más importante de la ciudad, Ordoño II.
Desde la céntrica y preciosa vía peatonal calle Ancha se accede a la amplísima explanada en la que se yergue la Catedral gótica (s. XIII). Es la Plaza de la Regla, rodeada de bellos edificios y desde la que parten recoletas callejuelas del León antiguo.
La Plaza de San Marcos recibe su nombre por ser el emplazamiento del Hostal de San Marcos,uno de los monumentos más importantes de Renacimiento español. Una laboriosa remodelación la libró del tráfico rodado, dando lugar a un formidable espacio coronado de pequeñas fuentes y zonas ajardinadas.